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Hace casi ocho años que empezamos a vivir en esta casa y empezamos a comprar muebles para vivir en ella. En ocho años nuestras necesidades han cambiado mucho de ser sinhijos que solo cenaban en casa a ser una familia numerosa – bueno más bien un poquito numerosa, que para mí el lío empieza con 4-5 peques XD- con hijas que comen mucho y un frigorífico diminuto. Cuando empiece Vega a comer va a volverse una situación complicada XD ¿Qué consejos tenéis cuando el frigo no crece al ritmo de la familia? Hoy os cuento los mios 🙂

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Esperaba que nuestro frigo se librara de la obsolescencia programada y nos durara mucho años, pero realmente empiezan a no caber la comida, sobre todo si intentas comer sano y congelar para dedicar menos tiempo. Si hoy tuviera que comprarme otra nevera pensaría en lo siguiente.

– El espacio disponible. Nuestra cocina es pequeñísima, de hecho estamos meditando hacer una obra para adosar el tendedero, que nunca se ha usado de tendedero pero si de trastero XD -Necesito un momento Marie Kondo en él-. Pero además está pegado al horno  y al microondas, que aunque no lo encendemos muy a menudo, es una fuente de calor importante. En definitiva, pensad mucho donde ponerlo.

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– La eficiencia energética. Ya os hablé en este post sobre ello, lo ideal sería que fuese lo más eficiente posible porque es el único electrodoméstico que nunca se apaga, incluso en vacaciones o en fines de semana en nuestro caso permanece encendido.

– Que sea no frost. La mayoría de frigoríficos ya cuenta con esta tecnología que evita tener que descongelarlo cada cierto tiempo. En nuestro caso nunca lo hemos tenido que hacer, bueno una vez de forma no voluntaria por un apagón con catastrófico resultado XD.

– Que tenga un cajón cero grados, para mantener la carné y el pescado durante más tiempo fresco. En mi casa se consume poco, ya que yo soy vegetariana y las niñas solo lo comen si está su padre en casa , así que nos viene genial.

– Que tenga un sistema para el agua y el hielo en la misma puerta de la nevera, aquí tengo sentimientos encontrados, por un lado lo veo super útil y por el otro no me acaba de gustar la idea, ¿lo tenéis? Puede evitar el síndrome de «voy a mirar la nevera como si fuera un cuadro de Dalí»,  que en mi casa no lo tienen las niñas, sino el padre XD

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– El tipo de frigorifico, aquí es donde nosotros nos equivocamos, si tuviera que elegir hoy uno nuevo, pensaría en comprar bien un frigorifico de tipo americano, bien comprar por separado un frigorífico y un congelador en vez de un combi. Son más espaciosos y en el caso del frigorífico puedes dejar reservada la bandeja inferior a los peques para que guarden sus snacks y puedan acceder a ellos de forma autónoma (siempre pensando en su salud y las dinámicas de vuestra familia, por supuesto). En el caso del congelador enorme me encantaría tener espacio para comprar frutas de temporada y congelarlas para mis batidos, congelar gofres caseros, masa de pizza, salsas y sofritos caseros, el pan integral que solo como yo, todas mis heladeras Zoku…

En este en este articulo «Cómo elegir el frigorífico perfecto para tu cocina»  tenés información sobre en que podemos fijarnos a la hora de comprarlo. Mientras tanto,  ¿Qué hacemos si no podemos comprar un frigo nuevo más grande? Una idea es tirar mucho de huerto, pero en nuestro caso solo podemos hacerlo los findes XD

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Os cuento como lo hacemos nosotros:

– Comprar más a menudo productos frescos, que en el fondo es una oportunidad genial para hacer actividades de vida práctica con las niñas, que colaboren y se sienten integradas. Haciendo compra de productos no frescos grande una vez al mes

– Repensar el espacio, en esto tenemos un buen entrenamiento de los años que tuvimos el Mini Cooper como único coche familiar XD

Usar bandejas, tomé esta idea de Montessori XD, compramos unas bandejas de plástico duro y transparente y las utilizamos para ordenar el espacio 51ig0vm4nul-_sl1000_ . 714iwdboicl-_sl1000_

– Reordenar cada vez que hagamos la compra y animar a los peques a mantener ese orden, podéis recortar y pegar fotos de los catálogos de comida para que se sientan más implicados y con más ganas de colaborar. En mi casa son ellas mismas las que se dan cuenta de lo que falta y bien lo reponen, como por ejemplo la leche, que la guardamos en la banqueta de la cocina, bien nos lo dicen para apuntarlo en la lista, aunque os tengo que confesar que a Abril no le hacen falta listas, ir con ella a comprar es una delicia porque siempre sabe lo que falta. Por cierto que en algun momento alguien me hablo de una APP para compartir la lista de la compra e ir apuntando «en la nube» y nunca he podido encontrarla. Soy toda oidos. Estaría guay un frigo que además gestionara lo que falta y si ya hiciera la compra online por ti ni te cuento XD

– Estamos valorando comprar un congelador pequeño para el tendedero -es cubierto- y  una fresquera como estas, para tenerla junto al frutero y que no llegue a pasar la fruta y la verdura por el frigorífico, para tener más hueco. Si las habéis usado soy toda oídos.

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*Gracias a Carrefour por confiar en nuestro blog y hacer que crezca.

 

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