Hoy en el blog os muestro una escuelita muy linda que hay en pleno centro de Madrid, en Chamberí. Gracias Marisol por crear este espacio tan bonito y gracias a todas las personas que lo han hecho posible.

Nombre del centro: Big Little School

Orientación pedagógica: MONTESSORI

Tipo de centro: Privado/Concertado/Público: PRIVADO

Etapa: Infantil 0-3, infantil 3-6

Ubicación: Madrid, Madrid, Chamberí.

¿Cómo surgió la idea de crear vuestro centro?

Como muchas veces ocurre, la maternidad pone tu mundo patas arriba. En mi caso la idea surgió inevitablemente al quedarme embarazada de mi primer hijo en 2015. Todas las ideas que rondaban en mi mente sobre educación en ese momento comenzaron a agitarse como emociones y necesidades urgentes. Y tomaron la forma de un blog y un pequeño espacio familiar en el que acompañar a unas pocas familias. Primero como madre de día montessori, luego como pareja educativa en un ambiente preparado. Desde aquí comenzamos a poner en práctica proyectos que refuerzan esta voluntad de cambio, e iniciamos un camino de formación y colaboraciones orientado a crear el espacio educativo ideal. Las niñas y niños que acompañamos en el inicio del proyecto fueron creciendo, la comunidad se hizo fuerte, otro bebé estaba en camino, y como no encontramos ningún cole que cumpliera todas nuestras expectativas y lo necesitábamos ya, decidimos crearlo cuanto antes. Algunas de esas expectativas de lo que no podía faltar eran:

• Un espacio cercano, en el barrio, y no en las afueras, donde poder acompañar la vida tal y como la habitamos en la ciudad (esto fue lo más difícil porque la situación inmobiliaria en la zona centro-chamberí es terrorífica).
• Educación Montessori de calidad. Más allá de la moda, con guías y asistentes formadas por la Asociación Montessori Internacional para asegurar su profesionalidad.
• Un programa educativo sólido y comprometido con la realidad local y lengua materna de las niñas y niños que acompaña.
• Una propuesta que integre la práctica artística, entrenamiento de la atención y la conciencia corporal, y la prevención del acoso escolar y las violencias machistas.

Y aquí empezó lo bueno. Una sucesión de nuevos posibles que fuimos conquistando en muy poco tiempo gracias al esfuerzo titánico de toda una comunidad convencida de la necesidad de un cambio. Así nace en septiembre de 2018 Big Little School como nuestro propósito de contribución social desde, por y para la infancia. Surge del convencimiento de que todo cambio acontece en el periodo de formación y que la educación es la única vía hacia la paz. Nace de un amor incondicional a la niñez y una profunda admiración de la infancia, apoyada en el conocimiento de que el único objetivo de la educación es que niñas y niños puedan desarrollarse íntegramente y adaptarse como seres humanos de su tiempo.

¿Cuál es la implicación de los padres en el centro?

Desde el inicio el proyecto pedagógico se extiende más allá del aula creando una comunidad familiar de acompañamiento a la crianza. En horario de tarde realizamos toda serie de talleres para familias siguiendo sus intereses, poniéndoles en contacto con profesionales de la música, psicología, enfermería… En el programa de mañana también hay espacio para las familias, teniendo un tiempo semanal en el que pueden realizar actividades con las niñas y niños desde sus propios talentos: dibujo, fotografía, huerto… Y muchas actividades que se realizan dentro de la escuela se apoyan con la petición de la implicación familiar. También tenemos excursiones quincenales para visitar espacios verdes, museos, mercados… a las que nos acompañan familiares. Y una vez al trimestre celebramos con todas las familias una fiesta de cambio de estación que es un punto de encuentro entre familias y escuela.

Además de todo esto existe la figura de “familia fundadora”, muy cercana al equipo educativo. Estas familias hacen una aportación económica en depósito o bien una colaboración práctica que les hace vincularse de manera mucho más cercana al proyecto. Muchas de estas familias nos ayudan con diseño gráfico, fotografía, asesoría, traducción, y también nos permiten desvincularnos un poco de los bancos para mantener nuestra autonomía. Ellas componen el círculo de familias fundadoras, desde donde evalúan y presentan propuestas que se llevan al círculo pedagógico, así que tiene influencia en la dirección del proyecto.

Al inicio del curso facilitamos a las familias una guía donde, además de explicar con detalle nuestro proyecto, damos orientaciones y herramientas para apoyar desde casa el trabajo realizado en el centro, con temas como la autonomía, la resolución de conflictos, el control de esfínteres, la prevención de estereotipos sexistas…

Tenemos la suerte de contar con una comunidad familiar muy implicada, que confía en nuestra propuesta, y la apoya y hace crecer con sus aportaciones.

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¿Por qué os decidisteis por esa pedagogía?

En nuestra guía familiar, que damos al inicio hay un apartado dedicado sólo a eso, la respuesta no es corta porque la lista de razones que nos llevan a elegir Montessori como metodología es interminable. Lo que sí puedo decir es que hemos querido que sea 100% Montessori porque entendemos que esta pedagogía no es una moda, no es un una ideología ni una herramienta, es un sistema completo, con base científica, que para funcionar debe implementarse en profundidad, no a pinceladas.

Por sintetizar nombraré sólo tres cosas que para mí marcan la diferencia no sólo con el sistema tradicional si no también con el resto de pedagogías activas:

1. La autonomía: la conquista de la autonomía motora, intelectual, emocional y moral es el motor de cada actividad de la infancia, junto al deseo de pertenecer, y creemos en una educación que permita entrenarla y no la merme.
2. Los tres maestros: en Montessori tan importante es el adulto que acompaña, como la niña o niño y su guía interior, y el ambiente del que absorbe indiscriminadamente los estímulos que serán la materia prima con la que construir el adulto que será.
3. La base científica: no me refiero sólo a que sea una pedagogía con más de 100 años de práctica demostrada, ni a que se haya diseñado atendiendo a las necesidades reales de la cría humana como especie, hecho que hace que se mantenga actualizada mientras sigamos siendo la misma especie, sino que además cada uno de los materiales y actividades están orientadas a crear el hábito de conocer críticamente el mundo.

¿Cómo y cuando se evalúa el desempeño de los alumnos?

Hemos decidido mantener la esencia del proyecto y la metodología Montessori, y para ello, prescindimos de exámenes y otros requerimientos de la escuela convencional. Nuestra principal herramienta de evaluación es la observación, lo que nos permite que también este proceso sea individualizado y respetuoso con el propio ritmo de desarrollo de cada cual. La observación es diaria, y se elaboran informes trimestrales sobre el proceso de desarrollo que se comparten con la familia en una reunión, de manera que la evaluación es continua, permanente y respetuosa.

¿Cómo es el periodo de adaptación?

Los inicios siempre son costosos. Tanto si es la primera vez que tu hija o tu hijo se queda en un espacio educativo, como si ya ha vivido otras situaciones de separación, necesitará un tiempo para adaptarse a nuestro ambiente, rutinas y comunidad. El mandato biológico de las niñas y los niños es precisamente adaptarse e integrarse en el ambiente y cultura que los acoge, así que cuentan con una serie de tendencias humanas y características especiales que van a facilitar su rápida integración. Nuestra guía, como siempre, será seguir a la niña y el niño en sus necesidades. Mucho me temo que los adultos ya no contamos con estas dotaciones especiales y adaptarnos a la separación, si es la primera vez, será más fatigoso en nuestro caso. Además, cada familia tiene necesidades concretas y distinta disponibilidad para acompañarles en el proceso. Por eso queremos ofrecer la seguridad de que haremos el acompañamiento en esta etapa de manera amable y respetuosa con todos, apoyándonos en la filosofía Montessori.

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¿Cómo trabajan los niños? ¿Cómo se distribuye la jornada en un día normal?

Las guías llegan a sus ambientes a las 8.30 para prepararlos para la jornada: Nido, para bebés de 6 a 18 meses, Comunidad, niñas y niños de 18 a 36 meses, y Casa de niñas y niños, de 3 a 6 años. A esta hora algunos ya comienzan a llegar aunque el ciclo de trabajo, es decir, el tiempo destinado a actividades, no comienza hasta las 9. Este ciclo es de distinta duración en cada ambiente, siendo de tres horas en Casa de niñas y niños, dos horas en Comunidad, y una hora en Nido. Durante este tiempo escogen libremente las actividades en las que ocupar su tiempo de entre aquellas que conocen, y también reciben presentaciones de algunas que aún son desconocidas. El material está organizado por áreas, accesible y llamativo, e invita a la manipulación. La disposición del ambiente permite la libertad de moviendo en todo momento.

Después de este ciclo toman un almuerzo (fruta de media mañana) y disfrutan de un tiempo de juego libre en nuestro patio cubierto, con módulos de movimiento y otros materiales de juego libre. Comen nuestro catering ecológico y saludable junto a sus guías, sabiendo que la comida es mucho mas que alimento, es un ritual social en el que compartir y aprender nuestra cultura. Después. según edad y necesidades, hacen siesta o talleres de mindfulness, psicomotricidad, arteterapia o storytelling. Un día cada dos semanas programamos la jornada en el exterior: al aire libre, en un museo, en un taller de danza, una granja, un mercado… Según la edad la jornada acaba a las 14, las 15 o las 16, pudiéndose siempre extender como máximo hasta las 16.

¿Hay tareas para casa? ¿Obligatorias u opcionales?

No. Respetar el tiempo de juego y descanso es tan importante como respetar su tiempo de trabajo. Ambos tiempos responden a necesidades básicas que hay que cuidar por igual.

¿Cómo es la atención a la diversidad para niños de NEE?

Consideramos las necesidades individuales de cada niña y cada niño, sus intereses y sus talentos, y también sus resistencias. No hay dos niñas o niños iguales y en Montessori se trabaja esta individualidad, se entiende que cada niña o niño presenta siempre sus propias necesidades especiales y esta es la base del método. Hay que recordar que en origen este método surgió en comunidades neurodiversas y desde su raíz integra la diferencia. Cuando una nueva familia se interesa en nuestro proyecto queremos asegurarnos de que conoce el espacio, y aquí le hablamos de nuestra pedagogía, materiales, instalaciones y personal educativo, para valorar conjuntamente si lo que podemos ofrecer se adapta a las necesidades específicas de cada niña. niño y familia.

¿Cómo se resuelven los conflictos?

Con sentido común y paciencia, y apoyándonos en la Disciplina Positiva y la Comunicación No-Violenta. Todas nuestras guías y asistentes, además de ser AMI, tienen formación en DP y poco a poco vamos haciendo extensiva también la formación en CNV. La formación como guía complementa perfectamente con Disciplina Positiva, que resulta una herramienta básica en el día a día. Siempre observándoles y evitando que puedan resolverlo de forma física, se verbaliza lo sucedido y se intenta poner palabras a lo que han sentido ambas partes. Se busca una solución buena para todas y todos, permitiéndoles participar en ella, y se plantean otros ejemplos que pueden suceder y qué herramientas pueden usar para resolverlos.

Cada vez que intervenimos para solucionar un conflicto entre niñas o niños les estamos privando de la oportunidad de aprender a resolverlo ellos mismos. Es exactamente igual que cuando les ofrecemos ayuda innecesaria para hacer cualquier otra tarea como ponerse los zapatos o comer por sí solos. Pero también hay que tener en cuenta qué grado de autonomía en resolución de conflictos tienen para no forzar situaciones para las que no tienen herramientas, y que están aprendiendo. Habrá ocasiones en las que consigan resolverlo sin ninguna ayuda por nuestra parte, habrá otras en las que tal vez necesiten simplemente que les guiemos un poco para que ellos lleguen a una solución y habrá otras en las que no consigan encontrar una solución y tengamos que proponer nosotros una o varias soluciones interviniendo. A medida que las niñas o niños van desarrollando su capacidad de resolver conflictos cada vez necesitarán menos intervención por parte del adulto. Les ayudaremos a hacerlo por sí mismas y mismos.

¿A cuánto ascienden las cuotas? 

Entre 519€ y 699€ dependiendo de la franja horaria y la edad. También ofrecemos cuotas reducidas y becas para familias que podrán ser solicitadas en la solicitud de admisión según criterios de renta familiar, número de hermanos en la escuela, antigüedad e implicación activa en el proyecto.

¿Algo más que os apetezca contarnos?

Actualmente tenemos abierto el plazo de inscripción  para el curso 2019/2020 y estamos realizando visitas al centro y jornadas de puertas abiertas para recibir a las familias interesadas, presentarles nuestro espacio, equipo educativo y detalles del proyecto. El próximo día 16 de marzo tenemos programadas jornadas de puertas abiertas a las 11.30 y a las 12.30. Si tienes curiosidad por conocernos o reservar plaza para el próximo curso va a ser una buena oportunidad. Puedes asistir confirmando aquí:

Sábado 16M 11.30: https://www.eventbrite.es/e/entradas-ii-jornada-de-puertas-abiertas-curso-1920-57382848645

Sábado 16M 12:30: https://www.eventbrite.es/e/entradas-ii-jornada-de-puertas-abiertas-curso-1920-1230-57382367205

Podéis visitar nuestra web, suscribiros a nuestra newsletter o escribirnos un email para recibir más información y estaremos encantadas de recibiros.

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*Las fotos son de María Carmona, de Angelita Harris. http://www.angelitaharris.com/