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¡Hola! Hoy os traigo una colaboración maravillosa, una entrevista súper completa con Riansares Medina Gómez, que es psicóloga general sanitaria, colegiada nº CM-02235 y además es especialista en altas capacidades. Compañera mía, educadora de disciplina positiva en aula y en familias. Además, de Neuropsicoeducadora y Directora y psicóloga centro Despierta Albacete. Y una bellísima persona y un amor absoluto con los niños y las niñas.

Os dejo con esta entrevista sobre ALTAS CAPACIDADES Y DISCIPLINA POSITIVA

¿Qué son las altas capacidades?

La definición del término alta capacidad presenta algunos matices. En primer lugar, se trata de un constructo psicológico, esto quiere decir que procuramos medirlo, para que así se convierta en cuantificable. Si nos preguntamos ¿cuánto mide tu alta capacidad?, cometeríamos un error si solo nos centramos en el valor del CI. Esto no es tan simple, sino que hemos de realizar una definición a partir de un planteamiento teórico. Aquí se encuentra el segundo matiz. ¿Con qué planteamiento teórico nos regimos? Son múltiples los modelos teóricos de las altas capacidades y superdotación, sin embargo, la definición que bajo mi juicio es la que permite el cuidado del niño, favoreciendo su desarrollo personal tanto a nivel cognitivo como socioemocional es la del megomodelo de altas capacidades de Olszewski-Kubilius, Subotnik y Worrell (2011). Definen las altas capacidades, como la manifestación del rendimiento que se encuentra claramente en el extremo superior de la distribución en un dominio de talento específico, incluso en relación con otros individuos de alto nivel de funcionamiento en ese dominio. Más aún, la alta capacidad puede verse como un proceso de desarrollo en el que, en las primeras etapas, el potencial es la variable clave; en etapas posteriores, el rendimiento es la medida de la alta capacidad; y en los talentos completamente desarrollados, la eminencia es la característica que hace acreedor a esta denominación. Tanto las variables cognitivas como las psicosociales juegan un papel esencial en la manifestación de la alta capacidad en cualquiera de los estadios del desarrollo, son maleables y necesitan ser deliberadamente cultivadas.

Si nos damos cuenta este modelo se centra en el rendimiento, en el que no solo tiene lugar la inteligencia como variable cognitiva, sino también variables no cognitivas que son realmente las altamente maleables. En la investigación realizada por Olszewski-Kubilius(2019) determinan estas variables maleables y determinantes para el desarrollo del talento: la autorregulación emocional, autorregulación cognitiva, autorregulación motivacional, autorregulación metacognitiva, habilidades sociales, conocimiento interior y asunción de riesgos.

Por tanto, este modelo nos recuerda a la famosa frase de Jose María Toro: “¿De qué sirve que un niño sepa colocar Neptuno en el Universo si no sabe dónde poner su tristeza o su rabia?”

 

¿Existe alguna aportación de la neurociencia que acompañe estos modelos teóricos de las altas capacidades?

Para poder situarnos en los factores neurobiológicos que acontecen en las altas capacidades intelectuales, nos guiaremos por el estudio realizado por Martin Mrazik y Stefan C. Drowoski,”Los fundamentos de la superdotación”, en el que indican que las altas capacidades intelectuales presentan cuatro características:

  • Desarrollo diferencial en el córtex frontal.
  • Mayor grosor del cuerpo calloso, lo que se traduce en una mayor comunicación interhemisférica.
  • Menor índice de consumo metabólico, lo que produce una mayor eficacia en la resolución de tareas, incluso en ocasiones llevando a cabo varias tareas simultáneamente con resultados eficaces.
  • Mejor distribución de recursos cognitivos, mediante el menor uso de zonas no específicas, en relación a la interconectividad.

Esto se traduce en que los niños con altas capacidades aprenden más rápida y eficazmente que sus iguales. Su aprendizaje no suele ser por repetición, sino desarrollado por el pensamiento arborescente de la capacidad de poder realizar un aprendizaje relacional, gracias a esa mayor conectividad interhemisférica. Esta mayor interconectividad entre las diferentes áreas del cerebro, provoca una coordinación e integración, la cual se basa y es causada por un desarrollo precoz de las áreas del córtex frontal. Lo que manifiesta la existencia de un conjunto de habilidades cognitivas neuronales de alto funcionamiento, incluyendo una capacidad ejecutiva elevada, junto con una memoria de trabajo más eficaz. Este precoz desarrollo de las funciones neurobiológicas favorecen la existencia de una inteligencia creativa de alto nivel, siendo esta la característica principal de las altas capacidades, junto con un procesamiento más rápido de la información, un mayor control cognitivo, y el deseo de perspectivas desde lo holístico hacia las partes.

Con las aportaciones de la neurociencia así como de los modelos teóricos, ¿qué indicadores podemos ofrecer para que padres, madres, profesores puedan estar atentos en la detección de las altas capacidades?

Aunque existe una gran heterogeneidad de los niños con altas capacidades, algunos indicadores generales, estos pueden ayudar a familias y centros educativos, en la identificación de los niños con altas capacidades:

  • Aprenden el material nuevo con mayor rapidez, y a una edad más temprana que los niños de su edad. Por ejemplo, en la etapa de primera infancia, puede llamar la atención de la facilidad para aprender las canciones, poemas…
  • Lo que han memorizado, lo mantienen en su mente con mucha facilidad, sin tener que revisar la información para almacenarla.
  • Los niños con altas capacidades, son capaces de lidiar con conceptos que son demasiado complejos y abstractos para los niños de su misma edad. Por ejemplo, un tema que suele llamar la atención es la curiosidad/temor que presentan hacia la muerte. Es importante, que acompañemos al niño en esta curiosidad para que no se forje pensamientos que puedan hacerle daño. Siempre pongo el ejemplo de un niño que con 3 años, había estado viendo un documental sobre los agujeros negros, él hizo su inferencia a que los agujeros negros podían estar en cualquier sitio, decidió que no debía sentarse en el wc, pues podría absorberle.
  • Muestran un marcado interés y pasión hacia algunos temas. Esa pasión les lleva al deseo de querer aprender más sobre ello, dedicando gran parte de su tiempo si es posible (no ha de ser siempre un interés escolar).
  • No tienen necesidad de estar mirando directamente al maestro cuando está explicando, pueden operar en múltiples canales simultáneamente, procesando más de una tarea a la vez.
  • Suele llamar la atención, los razonamientos que realizan sobre temas que no han sido explicados o propuestos.

 

¿Podrías decir que es fácil la detección?

Pues la realidad es que no es así. Hemos de tener en cuenta varios aspectos para situarnos:

En primer lugar, cada comunidad autónoma se rige por un modelo teórico, lo que dificulta a los agentes educativos concretar unos indicadores que permitan la identificación y por tanto, su intervención.

En segundo lugar, existe una creencia extendida y errónea, que los niños con altas capacidades son niños sobreestimulados. Está claro que una estimulación temprana, nos lleva a un desarrollo de nuevas vías neuronales, sin embargo, sabemos que existen ventanas de aprendizaje, es decir, el cerebro no está preparado para recibir cierta información en determinados períodos, necesita un andamiaje de construcción. El ejemplo, podría ser aquel niño o niña de 2 año al que sus padres le presentan las letras, seguramente las toque, las vea pero no adquiere el significado de la grafía ni de su representación, sin embargo, a un niño o niña con precocidad intelectual, si puede adquirirlo. ES muy importante acompañar al niño en los períodos sensitivos y poder aportar la estimulación que necesita en cada momento. Es la base del desarrollo de la curiosidad y de la motivación intrínseca.

Por desgracia, son frecuentes los niños de la etapa de 3 a 6 años, que bien por desconocimiento o bien por querer normalizar la precocidad, tienden a no ofrecer/aportar al niño la estimulación que requiere en ese momento, lo que conlleva a problemas de conducta, desmotivación, falta de curiosidad por aprender. Sabemos que la curiosidad es uno de nuestros instintos más reptilianos, y cuando esta desaparece suele ser muy complicado volver a conectar al niño en su aprendizaje.

En tercer lugar, hemos de tener en cuenta que puede darse la doble excepcionalidad. La doble excepcionalidad hace referencia a la presencia de dos (o incluso más) necesidades educativas diferentes. El que los niños y niñas presenten por ejemplo altas capacidades, puede conllevar también la manifestación de otras necesidades educativas.

Por tanto, las dificultades en la detección de altas capacidades en niños con doble excepcionalidad, os propongo aquellas que suelen ser más frecuentes:

– Altas capacidades y Déficit visual/Déficit auditivo/Déficit motórico. En este grupo de niños con doble excepcionalidad estarían las personas que poseen un déficit visual permanente y no pueden compensarlo, un déficit auditivo que puede ser con mayor o menor gravedad y un déficit motórico (un ejemplo podría ser el caso de Stephen W. Hawking).

-Altas capacidades y TDAH. Este tipo de doble excepcionalidad es complicada. Algunas investigaciones muestran que a veces, un niño es diagnosticado con TDAH cuando en realidad presenta altas capacidades y reacciona frente a un plan de estudios inadecuado; pero otras veces, puede ser que se presenten TDAH y altas capacidades conjuntamente. De este modo, es necesario tener en cuenta unos criterios para diferenciar un niño con altas capacidades que se aburre y un niño con TDAH.

-Altas capacidades y Trastorno del Espectro Autista (TEA). Los niños con este tipo de doble excepcionalidad, de acuerdo con la edición del DSM-5 (2014), presentan, además de las altas capacidades, un diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista (TEA), Asperger o Trastorno Generalizado del Desarrollo No Especificado.

-Altas capacidades y dificultades de aprendizaje, como puede ser dificultad en la lectura, en la escritura, en el razonamiento matemático. Lo que va a hacer muy difícil la identificación de ambas necesidades educativas.

En cuarto lugar, en la identificación de altas capacidades, es importante hacer referencia a las sobreexcitabilidades. A menudo muchas personas que viven alrededor de personas con Altas Capacidades, no pueden comprenderlos, encuentran en sus comportamientos una fuente de irritabilidad que les hace perder la paciencia, sin embargo cuando se combinan altas capacidades con sobreexcitabilidades se establecen altas posibilidades de alcanzar un alto nivel de desarrollo. Las sobreexcitabilidades de Dabrowski son emociones innatas que indican una alta capacidad de respuesta a los estímulos. Se encuentran en un grado superlativo en los sujetos altamente creativos y en los superdotados. Se expresan en una mayor sensibilidad, conciencia e intensidad. Dabrowski identificó cinco áreas de intensidad: Psicomotor, Sensual, Intelectual, Imaginativa, y Emocional. La fusión de las altas capacidades y la presencia de alguna sobreexcitabilidad conduce en una percepción de la realidad muy diferente, con otra intensidad y con un razonamiento muy superior.

-SOBREEXCITABILIDAD PSICOMOTORA. Es una elevada excitabilidad del sistema neuromuscular. Esta intensidad psicomotora se manifiesta en la activación enérgica mostrada en habla rápida, entusiasmo a veces desmedido, en el disfrute del movimiento en sí mismo, actividad física intensa y necesidad de acción. Cuando se sienten emocionalmente tensos, puede que hablen compulsivamente, actúen impulsivamente, se comporten mal y sobreactúen, muestren hábitos nerviosos, se sobreesfuercen y pueden volverse convulsivamente organizados o muy competitivos. Puede dar lugar a la confusión con la hiperactividad.

-SOBREEXCITABILIDAD SENSITIVA. Se expresa como una experiencia exacerbada de deleite o desagrado a través de los sentidos: la vista, el gusto, el tacto, el olfato y el oído. Puede ser que obtengan una experiencia mucho más expansiva de sus sentidos que una persona normal. Tienen una mayor y más temprana percepción de los placeres estéticos, tales como la música, el lenguaje, el arte, así como obtienen un deleite ilimitado de los gustos, olores, texturas, sonidos y vistas. Sin embargo, debido a esta hipersensibilidad, pueden llegar a sentirse sobre estimulados o incómodos con algunos estímulos. Estos niños pueden encontrar las etiquetas de la ropa, el ruido de la clase o los olores de su entorno como algo tan perturbador, que las obligaciones queden relegadas a un segundo plano.

-SOBREEXCITABILIDAD INTELECTUAL. Se refleja en una marcada necesidad de buscar el entendimiento y la verdad, de adquirir conocimientos, analizar y sintetizar. Los dotados con sobreexcitabilidad intelectual tienen mentes increíblemente activas, son intensamente curiosos, frecuentemente ávidos lectores y normalmente muy observadores. Son capaces de concentrarse, esforzarse intelectualmente en tiempos prolongados y son tenaces en la resolución de los problemas que ellos elijan. Otras características pueden incluir una planificación metódica y tener una marcada recopilación de detalles visuales. Frecuentemente ama la teoría, pensar acerca de pensar y el razonamiento moral. En su afán de aprender, pueden llegar a no desarrollar la empatía con los demás, pueden focalizar la necesidad de corrección en los demás, lo que puede resultar en ciertos momentos como altivo, provocando cierto rechazo social.

-SOBREEXCITABILIDAD IMAGINATIVA. Refleja un gran peso de la imaginación con respecto a la asociación de imágenes e impresiones, uso frecuente de metáforas, facilidad para inventar, fantasía, visualización al detalle y sueños muy elaborados. A menudo estos niños mezclan la verdad con la ficción y se crean sus propios mundos privados con compañeros imaginarios para escapar del aburrimiento. Les resulta difícil estar atentos en clase cuando la creatividad y la imaginación son secundarias respecto a una educación rígida. Escriben historias y dibujan en vez de estar a lo que tienen que estar en clase. También pueden tener dificultades en terminar las tareas si entre tanto, alguna idea increíble se les viene a la cabeza y les lleva a una tangente imaginaria. Lo que puede llevar a sospechar que presenta un déficit de atención y en algunos casos, cuando el niño disfruta en su soledad creativa, incluso pensar en un posible TEA.

-SOBREEXCITABILIDAD EMOCIONAL. Es la primera que los padres suelen notar. Se refleja en sentimientos muy intensos y realzados, complejas emociones extremas, identificación con los sentimientos ajenos y una expresión fuertemente afectiva. Otras manifestaciones pueden incluir respuestas físicas como dolores de estómago o de cabeza, rubor o preocupación por la muerte y la depresión. Tienen una marcada capacidad para las relaciones profundas; muestran fuertes conexiones con la gente, algunos lugares y con las cosas. Tienen compasión, empatía y mucha sensibilidad en las relaciones. Son conscientes con una gran precisión de cuáles son sus sentimientos, o de cómo van cambiando y creciendo, y a menudo llevan a cabo diálogos internos y practican la autocritica. Los niños con una fuerte sobreexcitabilidad emocional a veces son diagnosticados erróneamente con trastorno bipolar u otros problemas y trastornos emocionales.

El quinto aspecto a tener en cuenta, son las disincronías. Jean Charles Terrassier (1990) es quien ha estudiado en mayor profundidad, que parte de la premisa de considerar el desarrollo de los niños superdotados como algo heterogéneo. Y se refiere a la disincronía como «un desequilibrio en las capacidades del niño/a, producido por una diferencia en el desarrollo del sujeto y que afecta tanto a su propia dimensión interna como a las relaciones con el entorno». Las disincronías pueden ser internas o externas.

La disincronía interna. Aparece fundamentalmente en tres aspectos:

Disincronía inteligencia – psicomotricidad: Son muchos los estudios llevados a cabo por diferentes autores acerca de esta disincronía, presente en la mayor parte de los alumnos de altas capacidades. Aunque no sucede en todos los casos, hay un alto porcentaje que se suelen caracterizar por una gran capacidad intelectual y, sin embargo, una menor destreza motriz. Es muy común que estos niños tengan buenos resultados académicos en todas las áreas menos en educación física. También suele ocurrir, sobre todo en el caso de los niños, que tengan una mala grafía.

Disincronía entre lenguaje – razonamiento. Otra de las características de estos niños es poseer un amplísimo vocabulario superior a la media. Sin embargo, son capaces de razonar mucho más de lo que expresan con palabras.

Disincronía entre inteligencia – afectividad. Aunque un niño con Altas Capacidades de 8 años es capaz de poseer el desarrollo cognitivo de un adulto, no ocurre lo mismo con su desarrollo emocional. Emocionalmente el niño es muy sensible, vulnerable y consciente, por lo que es fácil hacerles daño. Razonan como adultos, pero no tienen las herramientas necesarias para enfrentarse a los sentimientos que esos razonamientos les provocan porque carecen de la experiencia de vida necesaria.

Disincronía social: «Resulta del desfase entre la norma interna de desarrollo del niño precoz y la norma social adecuada a la mayor parte de los niños» Terrassier (1994). Aparece fundamentalmente en tres aspectos: entre el niño y la escuela, entre el niño y la familia así como puede ser también entre el niño y sus compañeros.

En sexto lugar, es importante desmitificar el hecho de relacionar el perfeccionismo con las altas capacidades. El perfeccionismo es un constructo psicológico, multidimensional y complejo que concierne la búsqueda de la excelencia y la manifestación óptima de la alta capacidad. Comprende el conjunto de expectativas y estándares considerablemente elevados que se establece una persona con una fijación persistente. Por este motivo, normalmente se asocia el concepto de perfeccionismo con las altas capacidades. Ambos buscan el alto rendimiento y la excelencia, es por esto, que el perfeccionismo se ha considerado como un aspecto relevante a tener en cuenta para poder comprender en mayor medida algunos de los retos a los que el alumnado con altas capacidades se enfrenta. Si esperamos que todos los niños y niñas con altas capacidades sean perfeccionistas (la investigación indica que no es una característica que siempre esté presente en ellos) pasaremos por alto la identificación de muchos estudiantes que presentan altas capacidades (la de aquellos que no presentan perfeccionismo).

Sabemos que hay dos tipos de perfeccionismo, el positivo o sano, conocido como aquel que ayuda y fomenta el esfuerzo y la motivación hacia la meta propuesta lo que genera bienestar y la excelencia mediante perfeccionismo. Y, por otra parte, el perfeccionismo negativo que provoca en el alumnado en general, y con altas capacidades en particular niveles de ansiedad ante la evaluación, sintiendo miedo hacia el bajo rendimiento o el fracaso escolar, dificultando el desarrollo positivo de su potencial. Sus los altos niveles de autocrítica y la percepción de la falta de cumplimiento de sus expectativas o estándares definidos, les puede generar un resultado inferior o incluso abandonar la tarea, junto a un conjunto de dificultades psicológicas.

Ahora que hemos situado las altas capacidades, ¿cómo podemos ayudar a los niños y niñas con altas capacidades en casa, en el colegio, en definitiva en el desarrollo de su personalidad?

Lo más importante es ofrecer al niño o niña, la información que necesita para desarrollar un sano autoconcepto, esto que significa, que sea conocedor tanto de sus fortalezas así como de sus debilidades. Para ello le ayudaremos a identificarlas, con el fin de poder desarrollar sus habilidades, tal y como nos proponen Gagné y Olszewski, así como poder dar la respuesta adaptada y adecuada a las necesidades funcionales de su cerebro.

Para ello podemos realizar las siguientes recomendaciones:

  • Lo primero de todo conocer el perfil cognitivo y socioemocional del alumno, situarnos en la zona de desarrollo próxima, determinar intereses y motivaciones para poder planificar una intervención acorde a sus necesidades.
  • Dotar al alumno de información en torno a las altas capacidades, para que sepa como funciona su cerebro y poder situarse sobre lo que le acontece y siente. Creando una visión acorde para desarrollar un autoconcepto positivo.
  • Favorecer actividades metacognitivas que provoquen un desarrollo de la autonomía del alumno, como puede ser un entrenamiento en funciones ejecutivas.
  • Desarrollar un aprendizaje centrado en el error como fuente de oportunidad, no como fracaso
  • Es muy importante dotar al alumno con altas capacidades, herramientas socioemocionales para poder conocer y manejar la alta sensibilidad emocional

Cuando un niño o niña con altas capacidades, no es conocedor de sus fortalezas y diferencias, puede desarrollar un autoconcepto negativo, en el que perciba que su forma de entender, sentir y percibir es incorrecta y generar una baja autoestima. Incluso puede llegar a sentirse no perteneciente del grupo de referencia, al sentirse diferente, no entendiendo esa diferencia como parte de la diversidad y del enriquecimiento.

En este punto la Disciplina Positiva nos aporta las herramientas para poder promover en el niño o niña un desarrollo armónico y sano:

1.-Favorecer un autoconocimiento: Cuando nos preguntan los padres, si los niños deben ser conocedores de sus altas capacidades, nuestra respuesta es clara: si. Conocer y aceptarse uno mismo, es la base para una autoestima sana. Para poder ayudar a nuestros hijos/ alumnos a que eso suceda, debemos ser consciente en que espejo se ven reflejados. Ofrecer al niño o niña, una visión de sus fortalezas así como de sus debilidades, a la vez que enseñamos herramientas de autoconocimiento para poder suplir esa debilidad. Por ejemplo, si un niño de 6 años quiere aprender a multiplicar, pero todo el mundo le dice que no, puede pensar que quizás no es bueno ser inteligente si dicen que no debo aprender.

A los niños con los que trabajamos, les solemos explicar que su cerebro es como un coche de carreras, que puede ir a gran velocidad, y eso es bueno. Sin embargo, les explicamos que el día a día está elaborado para circular como un turismo. Por lo que muchas veces, les van a exigir ir más despacio de lo que su cerebro les pide. Algunas veces será poco agradable y otras veces, les permitirá corregir posibles fallos. Para cuando es poco agradable, les invitamos a tengan una parcela de su interés que les permita circular a la velocidad que su cerebro les demanda, en nuestro caso puede ser la participación en los grupos de enriquecimiento, puede ser plantear retos que quieren conseguir en su centro de interés…

2.- Apostar por entornos que generen sensación de pertenencia. Como hemos visto, los niños con altas capacidades pueden llegar a sentir que son diferentes y que no llegan a encajar en su grupo de pertenencia. En especial, las niñas y los adolescentes con altas capacidades. Para ello, favorecer su autoconocimiento centrado en fortalezas, desarrollo de dinámicas de inclusión así como el valor de riqueza que nos aporta la diversidad, tanto en casa como dentro del aula.

3.- Búsqueda del aprendizaje centrado en el error y el esfuerzo como fuente de perseverancia, así como resolución de problemas. Las cosas no siempre salen a la primera. Para evitar el abandono, es importante recordar a nuestros hijos que no todas las cosas salen a la primera, que confiamos en ellos en su lucha por conseguir ese objetivo (es decir, que permanecemos a su lado para dar ánimos y tenderles la mano cuando nos lo pidan, no para hacer por ellos ese trabajo) y que con independencia del resultado final, el valor de su esfuerzo y de los logros que ha ido consiguiendo en pequeños pasos. Enfocar la inteligencia como algo que puede cambiar, nos lleva a desarrollar la mentalidad de crecimiento, entendida como el camino a la excelencia gracias al esfuerzo y el error como fuente de aprendizaje.

4.- Favorecer entornos de empoderamiento y enfoque en fortalezas. Favorecer situaciones donde el niño se sienta capaz para poder extrapolarlo a otras situaciones, hacer consciente esas fortalezas para poder guiarle en su aprendizaje. Hacerle partícipe de su aprendizaje, en la escucha atenta de sus intereses, pues el motor de su motivación.

5.-Desarrollo de habilidades de autorregulación emocional. Como hemos visto, los niños con altas capacidades pueden presentar una sensibilidad emocional más intensa, aportarles herramientas como el tiempo fuera positivo, técnicas de respiración consciente, rueda de opciones de soluciones, así como una educación emocional con el objetivo de favorecer un autoconocimiento mejor y por tanto, una búsqueda de soluciones óptima.

6.-Entender las metas erradas. Ayudar a los padres y profesores a entender la lógica privada de los niños, es una gran fuente de información para poder buscar soluciones conjuntas. En este caso, junto a la lógica privada hemos de situarnos en sus necesidades neurofuncionales, así como el perfil cognitivo y socioemocional de cada niño.

Cuando una familia acude a vuestro centro, ¿Qué podéis ofrecerles?

Lo primero que hacemos es elaborar el perfil cognitivo y socioemocional de cada niño, para poder determinar sus fortalezas, debilidades y que necesidades deben ser atendidas. Sobre este perfil, podemos ofrecer desde la intervención individual, enfocada en guiar a familias, centros educativos o al propio niño, a resolver conflictos/desarrollar habilidades/favorecer el autoconocimiento,… O participación en grupos de enriquecimiento. Trabajamos en dos salas: emotipensantes, donde trabajamos la consciencia de las emociones para hacerlas llegar a nuestro pensamiento y así poder gestionarlas; y pensantemoti, donde desarrollamos la parte superior de nuestro cerebro mediante programas de enriquecimiento, entrenamiento en habilidades metacognitivas y programa de pensamiento computacional, con el fin de llegar a las emociones que abran la curiosidad y la motivación.

 

 

En estos momentos, de renovación y de reinventarse, hemos unido fuerza y creatividad todos los centros Despierta y nos encontramos en plena preparación de un evento online muy divertido que tendrá lugar este verano, al que podrán acceder todos los niños de España y del extranjero. Se trata de un Campus virtual, donde podrán desarrollar intereses muy variados, a la vez que conocen a otros niños con los mismo intereses y motivaciones. Tenéis la información aquí.

Si queréis contactar con Rian, podéis contactarla por redes sociales (facebook o instagram), en su web,  por email a albacete@programadespierta.es. O en su centro: Teléfono :967616137 o 601287569  Dirección :C/Feria 121,1 02004 Albacete

 

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