Hoy os traigo una colaboración con una de mis alumnas Montessorizate y un precioso proyecto solidario en Ciudad del Cabo. Os dejo con ella:
Mi nombre es Beatriz, madre y maestra Waldorf. En 2014 me embarqué a Ciudad del Cabo como maestra voluntaria en una escuelita Waldorf en el poblado de Masiphumelele. Allí conocí a Tamara y Lungi, las responsables de que decidiera alargar mi estancia por tres meses más para fundar “Extend the Brightness Home-School”, el proyecto que permite dar hogar a niños que no pueden ser atendidos por sus padres en sus horas de trabajo.Ahora colaboro desde Madrid, manteniendo el contacto, casi diario, con Tamara como puente para atender las necesidades del proyecto.
¿Cuál es la situación en que viven las personas de la comunidad de Masiphumelele?
Masiphumelele es un poblado a unos 40 km al sur de Ciudad del Cabo. Comenzó como un asentamiento informal en la década de los 80 cuando Xhosa hablantes emigraron de sus zonas en busca de trabajo. Hoy en día está superpoblado con cerca de 40.000 habitantes. La mayoría son familias muy pobres, sin trabajo y el 80% viven en chabolas.
En Masiphumelele existen dos zonas diferenciadas: una donde la mayoría de hogares son de ladrillo y otra zona de asentamiento informal e ilegal, llamada Wetlands (humedales). Es aquí donde se ubica nuestro proyecto.
En espacios de 24 m2 pueden convivir hasta seis personas. En invierno su rutina es fría y húmeda. En verano, bajo sus techos de hojalata sufren el calor sofocante. Tienen electricidad, pero el agua potable deben traerla de un grifo común -a cierta distancia- teniendo que trasportar hasta 10 litros sobre la cabeza. Los inodoros también son compartidos por unos 60 adultos y niños.
¿Qué motivó el proyecto?
La situación de muchos niños del poblado que vagan solos por las calles durante todo el día, hasta que los padres regresan de trabajar o de buscar trabajo. Por lo general sus padres no pueden pagar los honorarios de guarderías y escuelas, o son familias disfuncionales que no ofrecen los cuidados suficientes a los pequeños.
Esta situación tocó el corazón y la valentía de dos grandes mujeres de Masiphumelele: Tamara y Lungi, quienes tuvieron la idea de crear una Escuela- Hogar para los niños de Wetlands. Yo las conocí mientras realizaba mi voluntariado y juntas comenzamos a hacerlo realidad.
¿Cuál fue la mayor dificultad para arrancar el proyecto?
Sin duda la búsqueda de un espacio donde albergar la “Escuela- Hogar” sin ningún tipo de presupuesto. Pero aún así estas mujeres decidieron seguir adelante y empezar. Fue así como compartiendo el sueño con amigos y familiares, alguien se ofreció a pagar el alquiler del espacio para poder arrancar.
De inmediato, comenzaron a recoger niños de la calle a principios del mes de septiembre de 2014. ¡La segunda semana ya eran 18 niños entre 2 y 11 años de edad!
¿Cómo crees que está cambiando el proyecto la vida de las personas de la comunidad?
La palabra ‘Masiphumelele’ en xhosa significa ‘vamos a tener éxito’ y no hay nada más importante para los residentes del municipio que la educación. Las familias se sienten esperanzadas y agradecidas de que sus hijos acudan a un espacio educativo seguro, donde pueden aprender. Sienten que la educación puede ser la salida a la pobreza.
¿Cómo ha evolucionado la escuelita desde que se inició?
Actualmente el proyecto se encuentra “en crecimiento”, porque gracias a los fondos recaudados por varias campañas, pudimos adquirir nuestro propio espacio. Ya que no era imposible seguir atendiendo a los niños en un lugar tan reducido.
Aunque aún falta restaurarlo y hacerlo confortable para volver a acoger a los niños en Enero, cuando comienza el curso escolar en Sudáfrica.
¿Cuáles son sus necesidades más urgentes y qué se necesita para lograrlo?
El objetivo principal ahora mismo es reabrir la escuela antes del comienzo del nuevo curso, y para ello se necesita terminar de pagar el espacio y acondicionarlo para los niños (suelo, ventanas, pintura…). Un presupuesto de 1000€.
Sin contar que las docentes no cobran por su trabajo. Ellas están día a día haciendo crecer el proyecto, y resolviendo las dificultades que se encuentran por el camino.
¿Qué ayudas reciben? ¿Cómo se financian?
La realidad es que sólo dos familias han podido hacen aportaciones puntuales. El proyecto tampoco recibe ninguna ayuda estatal.Principalmente se mantiene de lo que podamos recaudar a través de donaciones puntuales de amigos y familiares, las campañas que fomentamos de recolección de fondos como sorteos, o la que iniciamos a través de la plataforma Teaming.
¿Qué crees que se necesitaría para que el proyecto se mantenga en el tiempo?
A corto plazo nos urge cubrir la deuda del local y su reforma. Luego los gastos serán manejables y podrán ser cubiertos con las pequeñas cuotas que puedan pagar las familias y las aportaciones mensuales que hemos conseguido a través de Teaming. A medio plazo sería agradecer la labor de Tamara y las maestras con una retribución económica, que les permita convertir su pasión en su medio de vida.
Una vez superados estos primeros escollos, lo veo funcionando sin grandes trabas en el futuro. La Escuela Hogar siempre estará llena de niños sonrientes por tener una oportunidad, cantarán en el coro de buenos días, seguirán jugando libremente y yendo al parque cada día. Antes de comer, llegará la hora del cuento y después, a echar la siesta. Y así volverán mañana tras mañana con una sonrisa aún más grande.
- ¿Qué pueden hacer las personas que estén leyendo este post y quieran ayudar?
1.Colaborar:
– Participando en nuestro sorteo de un portabebés OmbuSAD y bolso de cadera a juego en wax africano, donado por Siriñadas. Son preciosos. Hazte con tu número en nuestro Evento.
– Convirtiéndose en Teamer y aportando 1€ al mes. https://www.teaming.net/extendthebrightnesshomeschoolsouthafrica
– Haciendo una donación en la cuenta ES88 0075 8577 9907 0040 6038 (Concepto: Escuela Sudáfrica)
2.Difundir el proyecto
– Conociendo nuestra aventura a través de nuestro Facebook donde contamos novedades y compartimos la evolución del proyecto. https://www.facebook.com/homeschoolwetlands/
– Contándoselo a sus amigos y familiares mientras tomas el café.
- Proponer ideas de cómo recaudar fondos.
Ojalá siga creciendo el proyecto y cada vez más niños puedan tener una oportunidad en un continente olvidado y saqueado por el capitalismo y la avaricia de multinacionales y gobiernos del 1 mundo!
Muchísima suerte!