Hoy os traigo un post que solo llevaba un mes preparándose, Macho Alfa está en modo vacaciones, jij, le pedí que nos hiciera un post rapidito, pero él no es de rapiditos, es de cosas bien hechas (y de procastinar a tope xD). Pero por fin está aquí el post sobre juegos de viaje, ideales por su pequeño tamaño para llevarlos con nosotros de vacaciones, o a la piscina o para una sobremesa si comemos fuera. Para los peques tenéis también en el blog este set de viaje para niños y estas recomendaciones para viajar con niños. Si queréis comprar algún juego os dejamos (en los títulos) los enlaces a Amazon para vuestra comodidad*

Además, os cuento que el famoso Cierra la caja lo han sacado en versión mini en Tiger, ideal para viaje, y hay otro juego que es complicado de encontrar pero nos encanta. Se llama Diabolo y lo edita Amigo – Spiel + Freizeit GmbH. Me lo regalo un amigo australiano hace muchos años porque nos encantaba jugar juntos, pero no lo encontrábamos en España. Si viajáis a Alemania y lo encontráis, ¡echadle un ojo!

Os dejo ya con la selección de MachoAlfa: 10 juegos de viaje para niños y mayores, como véis tenemos ahora dos ayudantes con manitas rechonchas para hacer fotos jijiji Emma ya ha decidido que tiene tres años y puede ser ayudante de fotografía como su hermana XD

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1/ Verfühlt Nochmal

Si os soy sincero, no daba un duro por él. Componentes sencillos, dibujos un poco ñoños y la mecánica más sencilla del mundo, y, sin embargo, este juego de nombre impronunciable se ha revelado como la mejor adquisición del verano.

El juego consta de una serie de tarjetas con un objeto dibujado en cada una (un coche, un pez, una serpiente, etc.), unas pequeñas figuras de madera que representan a los dibujos de las tarjetas y 10 bolsas de tela para introducir las figuras de madera. Si habéis estado atentos, ya habréis pillado el truco. Efectivamente!!! metemos cada objeto en una bolsita, las mezclamos y barajamos las tarjetas para ir revelándolas una a una y que los peques vayan buscando los objetos señalados usando solo el tacto. Quien antes encuentre la figura gana esa tarjeta, y el jugador que más tarjetas tenga al final gana la partida. Más sencillo no podía ser, bueno, miento, solo falta que las bolsas sean transparentes, pero ahí está la gracia. Los peques se tronchan mientras todos (a la vez) revuelven las bolsas y buscan como locos, es la leche de divertido!!!

No obstante, no hay que olvidar que esto genera un caos importante y que pueden desencadenarse ciertos conflictos, no hay problema, el juego admite todas las variantes posibles. Coge un reloj de arena de no más de un minuto y haz turnos para que cada jugador tenga un tiempo determinado para encontrar el objeto que aparece en su tarjeta. También puedes hacerlo cooperativo, todos buscan el objeto y todos ganan, o se ayudan los unos a los otros o por equipo…como veis, las posibilidades son muy variadas.

Aunque Emma (con dos años) no acaba de entender la mecánica de juego, podemos jugar con ella en equipo o en modo cooperativo, o incluso como una actividad de emparejar los objetos con las tarjetas (parecido a los sólidos geométricos Montessori) o como una bolsa misteriosa ( para ejercitar el sentido estereognósico me chiva Bei)

2/ Spot it

Otro hit sencillo, una serie de cartas circulares (sí, circulares…lo que hace el márketing) en las que aparecen números y figuras geométricas de colores. Viene en una pequeña cajita metálica que cabe en cualquier lugar y es fácilmente transportable.

En cuanto a la mecánica, se sacan las tarjetas de dos en dos y hay que ser el más rápido en encontrar la figura o número que coincide en ambas. Quien antes lo averigüe coge las tarjetas y se las guarda, gana el jugador que más cartas tenga al final.

Tampoco tiene mucho más misterio, pero es muy adictivo y rápido, lo que es ideal para los más peques que poco tiempo pueden parar quietos.

Muy parecido a Dobble

3/ Story Cubes

Uno de mis favoritos y que acabará por ir conmigo al trabajo para introducirlo en el aula. Diseño atractivo, caja pequeña, fácilmente transportable e instrucciones sencillas. Y o mejor de todo, solo pide más de un jugador, una edad mínima de seis años (requisito puede reducirse uno o dos años, depende de como sea el peque) y que empecemos con “Érase una vez…”

En fin, que me enrollo, 9 dados de seis caras con un dibujo distinto en cada cara, Cada jugador tira todos los dados, se fija en el dibujo que más le guste y utiliza todos los demás para construir una historia con principio, nudo y desenlace. Si queréis, cuando todos os jugadores terminen podéis votar a a mejor historia.

Si esto se os queda corto, tirad los dados, inventad un protagonista y construid su historia, o contad la historia por capítulos según en número de jugadores, y que el último revele el apoteósico desenlace (os gustaría reescribir Lost o Breaking Bad?) Podéis, incluso, mezclar los dados básicos con otras expansiones para llevar a vuestros protagonistas a otros lugares u otras situaciones (os imagináis a Darth Vader usando el poder oscuro de la fuerza en la Prehistoria?)

4/ Fantasma Blitz 2.0

Rápido y entretenido, una buena opción para jugar con los peques y con los no tan peques.

El juego consta de cinco piezas (toalla, fantasma, bañera, cepillo y rana) y una serie de cartas en las que aparecen esos mismos objetos.

La preparación es sencilla, se barajan las cartas y se dejan todos los objetos al alcance de los jugadores. Se elige un jugador inicial y este da la vuelta a la primera carta del mazo, gana el jugador que antes coja el objeto que aparece en la carta si es exactamente igual a uno de los que están en el centro de la mesa. En el caso en el que no aparezca uno de esos objetos, gana el jugador que coja el objeto que no aparece  y que no comparte color con alguno de los que si lo hacen en la carta.

El juego termina cuando todas las cartas del mazo se acaban, el ganador será el jugador que más cartas posea como recompensa de las diferentes rondas.

Nosotros hemos jugado mucho con Abril durante estas vacaciones, no obstante, hemos tenido que hacer algunas modificaciones para evitar que pudiera frustrarse. Jugar por turnos o en equipos nos ha funcionado muy bien.

Como último apunte, este juego es una segunda parte del Fantasma Blitz original, y puede jugarse por separado o combinarlo con el primero y hacer las partidas más interesantes.

5/ Math Dice (Think Fun)

La forma más sencilla de practicar el cálculo mental y practicar con nuestros peques. Un juego sencillo, con componentes de gran tamaño, atractivo y preparado para levar a cualquier lugar (hasta el tablero es de tela!!!!)

La mecánica es muy sencilla: los jugadores ponen sus peones de cartón en la salida y, por turnos, van lanzando el dado de 12 caras y los 5 de seis. Hay que sumar o restar los resultados de los dados de 6 caras para obtener el número que aparece en el dado de 12 caras; no es necesario utilizar los cinco dados, pero lo más recomendable es usar el máximo número posible ya que, tras el cálculo, el número de dados utilizados será el número de casillas que avance nuestro peón.

Lo mejor es que los peques ya tengan nociones básicas de sumas y restas, pero también es ideal para los que empiezan o para que los adultos no nos oxidemos. En nuestro caso, con Abril constamos los puntos de los dados y vemos si coinciden con el dado de doce caras, y con Emma, bueno, ella es todavía muy pequeña, pero ya la hemos pillado varias veces emparejando por colores los dados y los peones…a su manera, siempre se divierte

6/ Uno

Poco que decir de este clásico rápido y adictivo (¿Quién no se ha jugado algún reto piscinero o ir a por las bebidas jugando al Uno?) Combina cartas con el mismo color o con el mismo número, utiliza las cartas especiales y amarga la partida a tus rivales. Se el último en quedarte sin cartas y gana la partida. Solo un consejo: no olvides gritar UNOOOO!!!

7/ Hanabi

Otro «cañón» de juego en caja pequeña para que lo llevéis en cualquier lugar. Quizás un juego más para mayores que para muy peques (la caja recomienda una edad mínima de 8 años), porque , aunque es cooperativa, exige el uso de la memoria y planear las jugadas con antelación.

El juego consta de 60 cartas (10 por cada color -r, am, az, n y v- y 10 multicolor con valores numéricos entre 1 y 5) y una serie de tokens de cartón para marcar las posibilidades de dar información y los fallos que os podéis permitir.

Como os he dicho, el juego es cooperativo, es decir, todos los jugadores forman parte del mismo equipo pirotécnico y todos seréis responsables de que el espectáculo sea un éxito o un fracaso. Para ello, entre todos debéis construir una castillo de fuego de cada color con valor numérico creciente y sin poder repetir cartas. Hasta aquí todo normal, sin embargo, la chispa del juego la encontraréis en que los jugadores conocen las cartas de sus compañeros, pero no su propia mano, información que podréis recibir o dar a los demás pagando los tokens correspondientes.

Así, casi a ciegas, los jugadores se harán una idea de su mano y, apoyándose en las manos de los demás, intentarán alcanzar el objetivo procurando no cometer tres fallos.

8/ Sushi Go!

Una monada de juego, ya solo la edición da ganas de adoptarlo, ponerle un nombre y tratarlo como uno más de la familia. Una caja metálica que contiene 108 cartas que, como su nombre indica, representan diferentes tipos de sushis monérimos y sonrientes que deberemos combinar de la mejor forma para obtener la máxima puntuación posible y ganar la partida.

Sushi Go! es un juego competitivo que jugaremos en tres rondas y con cartas diferentes cada una de ellas, me explico, aunque todos recibamos el mismo número de cartas y debamos elegir jugar en secreto una de ellas, al final de las ronda deberéis pasar el resto de cartas al jugador que tengáis a vuestra izquierda para coger las que os llegarán del jugador de la derecha. Al final de cada ronda, y antes de hacer el cambio, cada jugador revelará su carta elegida y se apuntará los puntos correspondientes si procede (existen combinaciones de cartas que dan más puntuación pero que necesitan más rondas para dar sus frutos). Al acabar las tres rondas y llegar al postre, gana el jugador que más putos tenga.

En este caso, la caja recomienda que los jugadores sean mayores de 8 años, pero con cierta ayuda podemos ir introduciendo a los más peques, además, recomiendo que juguéis con el estomago lleno para evitar comeros alguna de las cartas ( lo digo por experiencia, cada vez que juego me acuerdo de las ruedas de sushi que vimos en Japón, XD)

9/ Timeline

Llevábamos «time» detrás de este juego y ha sido, sin duda, una muy buena adquisición para estas vacaciones. Un juego sencillo, que puede llevarse a cualquier lugar y que os sorprenderá cada vez que lo juguéis.

La mecánica es muy sencilla: cada jugador coge una serie de cartas que muestran un invento o evento histórico por un lado, y el año en el que se desarrolló por el otro. Los jugadores no podrán ver el año hasta que no juegue la carta que deseen. En el centro de la mesa se coloca una carta con su año revelado a modo de punto de inicio, y todos los jugadores, por turnos, deberán colocar sus inventos o eventos a izquierda o derecha del punto inicial según crean si son anteriores o posteriores. Si fallas, te descartas y coges otra carta del mazo de inventos/eventos, si aciertas, la colocas y amplias la línea cronológica dando más opciones a los demás jugadores. Gana el jugador que antes se quede sin cartas.

Es más recomendable a partir de 8 ó 9 años, pero también admite muchas variaciones, y jugar por equipos puede ayudar a incluir a los más peques.

10/ Preguntas de mierda

Juego para los mayores, muy recurrente para esas barbacoas que podéis organizar en esta época del año o para una cena cuando ya se quita el calorcito (mejor si estáis al final, con unas cervecitas fresquitas) Mi consejo: que seáis muchos, que no tengáis complejos y que aceptéis los retos rápidamente y soltando lo primero que se os venga a la cabeza.

No esperéis un juego sesudo, sí, son preguntas, pero esto no es un Trivial. Tenéis preguntas de todo tipo, pero estas no miden la cultura sino lo divertido de las respuestas. ¿Cuál es la composición ideal de una orgía? o ¿Qué marrón no has contado nunca a tus padres?, son algunas de las preguntas que os podéis encontrar. Y si queréis jugar al poker, no guardéis el juego, las cartas vienen preparadas para poder ser utilizadas como cartas tradicionales. Todo en una pequeña caja que no supera los 9 €.

Cualquier sugerencia que tengáis será bienvenida para ampliar la juegoteca 🙂 Os espero en los comentarios.

¡Feliz verano!

 

 

 

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