¡Hola! El post de hoy es muy cortito, continuando con la serie de materiales Montessori que merece la pena fabricar, os traigo las botellas de sabores, que junto con los cilindros de olor, y los cilindros de sonido, es uno de los materiales más sencillos de fabricar: Tan sólo necesitamos 8 botellitas con gotero (yo tengo séis porque me las regalaron y siempre se me olvida preguntar en alguna farmacia), cuatro líquidos diferentes y un peque con ganas de aprender ¡y probar! Esta actividad vale para hermanos de distinta edad porque mientras el mayor puede emparejar, el pequeño puede simplemente disfrutar probando. ¿os animáis?

Primero pintamos las mitad de las botellas, para hacer parejas de sabores, utilice un rotu indeleble para pintar un circulo, pero lo ideal sería usar un tapón de distinto color. Preparamos los líquidos que serán:

– Salado: Sal + agua

– Dulce: Azúcar + agua

– Agrio: Zumo de limón + agua

– Amargo: Tónica o café + agua

Preparar las botellas es una actividad  de vida práctica en si misma, verter, limpiar lo derramado,  remover y traspasar con un embudo.

Cuando tenemos todas las parejas, pegamos unos gomets para que sean autocorrectivos

Y así quedaron nuestros materiales caseros terminados, rehechos tras el pequeño incidente de las dos brujitas 🙂

¡Muy muy fácil! ¿Verdad? Os explico brevemente la presentación:

1) Ponemos sobre un tapete las botellitas, una servilleta y una cuchara; e invitamos al niño.

2) Muy despacio vertemos con el gotero sobre la cuchara y lo probamos. Limpiamos con la servilleta.

3) Continuamos con todos los frascos emparajeando los sabores que sean idénticos.

Cuando lo tenga dominado, le damos el vocabulario: Agrio, amargo, dulce y salado.

Os dejo una presentación (en inglés me temo)

Aprovecho para recordaros que buscamos colaboradores para proyectos DIY,  si tienes algo que debe conocer el mundo, ¡escríbenos!

¡Que tengáis un miércoles estupendo!